Primeros Ministros de Alemania (ADF)

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A lo largo de la historia de Alemania han existido diversos Primeros Ministros que han ayudado de alguna manera al desarrollo tecnológico, cultural, económico y político del país. He aquí una lista de ellos.

Ernst von Pfuel (21 de octubre de 1849 - 1853)

Ernst von Pfuel fue Primer Ministro desde el 21 de octubre de 1849. Este había sido Primer Ministro provisional hasta entonces, y antes de eso Ministro de Guerra de Prusia. En su plan de gobierno, expresado ante la Volkshaus y posteriormente ante la Staatenhaus el 22 de octubre, declaró que defendería los derechos y el honor de rey, pero que también "en forma decidida, mantendría la vía constitucional, defendería las libertades ganadas, rechazaría todos los esfuerzos reaccionarios, introduciría los principios constitucionales en todas las ramas del servicio público y mantendría sagrados los derechos y libertades del pueblo alemán". Participo activamente en la guerra de las cinco semanas y gran parte de la victoria se debió gracias a su intervención y a sus estrategias.

Ernst von Pfuel.

Entre su obra mas importante se encuentra la construcción de los edificios para la administración del nuevo Imperio Alemán, como el edificio del Reichstag, donde se encontraban ambas cámaras del Imperio, la Staatenhaus y la Volkshaus, y el edificio del parlamento de Prusia (Preußischer Landtag). Pfuel es conocido por sus reformas al deporte militar. Introdujo las clases de natación para los soldados y en 1810 había fundado en Praga la primera escuela militar de natación. En 1817 también había fundado en Berlín un centro de baño y de natación militar en el río Spree que estaba abierto al público y en particular para los jóvenes de edad escolar. Este centro de natación permaneció abierto hasta 1925. Estableció obligatoria la instrucción de la natación como algo obligatorio en el ejercito alemán, así como también extendió la linea de telégrafos del país, de Prusia a toda Alemania. Asimismo contribuyo a la construcción de ferrocarriles en las regiones menos industrializadas a través de subsidios, para el posterior desarrollo económico de estas zonas y poder comunicar la nación alemana en su totalidad. Así fomentó la industrialización alemana a través de subsidios. En cuanto a política exterior, apoyo pasivamente la unificación italiana y busco un acercamiento con otras potencias europeas, específicamente con Reino Unido. Su mandato como Primer Ministro termino en 1853. Sirvió en la Staatenhaus (la cámara alta del Reichstag) luego de su mandato hasta su muerte.

Otto Theodor von Manteuffel (1853 - 1857)

Manteuffel fue Primer Ministro desde el termino del mandato de Pfuel, en 1853. Su obra mas importante fue establecer una menor regulación en la economía alemana. Removió cierta regulación en las instituciones financieras y limito los poderes supervisorios en las industrias del acero y del carbón, lo que ayudo a fortalecer la economía alemana. Asimismo intento establecer el primer estado de bienestar (adelantándose a Bismarck en este sentido) para disminuir el descontento social existente entre las clases populares para ese momento, sin embargo, los ultraconservadores y los conservadores no se lo permitieron.

Otto Theodor von Manteuffel.

En el Parlamento, busco servir como mediador entre todos los partidos políticos a la vez que hacia que se apoyaran sus proyectos de ley. Continuo con los proyectos de construcción del Reichstag y del Preußischer Landtag y en su mandato se vieron sus culminaciones. Fue un primer ministro conservador y defendió los derechos del rey. También creo el periodico "Die Heimat" con el cual tuvo la intención de hacer mas favorable la opinión publica hacia su gobierno y los conservadores.

Termino su mandato en 1857. Luego de eso, se retiro de la vida política y vivió en Luckau, Niederlausitz. Murio en ese lugar el 12 de noviembre de 1882. Hoy en dia diversas calles berlinesas llevan su nombre, como la Manteuffelstraße. Sin embargo, su aporte fue menor que el de muchos primeros ministros.

Albrecht von Roon (1857 - 1861)

Ascendido a general mayor en 1856 y a teniente general en 1859, Roon había cumplido varias órdenes y había sido empleado en misiones importantes desde 1850. El Príncipe Guillermo se convirtió en regente en 1857, y en 1857 seleccionó a Roon como primer ministro. Apoyado por Edwin von Manteuffel y el nuevo jefe prusiano de recursos humanos Helmuth von Moltke, Roon pudo hacer que sus planes para la reforma del ejercito fueran considerados y finalmente adoptados. Su objetivo era crear una nación armada para extender el sistema de Gerhard von Scharnhorst y adaptarlo a las circunstancias de Alemania. Para conseguirlo propuso tres años de servicio universales, y una reserva (Landwehr) para la defensa del país cuando el ejército estuviera manteniendo enfrentamientos.

Roon durante su último año como primer ministro.

Otro aporte suyo fue el establecimiento del Protectorado de Siam, con la finalidad de tener presencia alemana en la zona y evitar que Francia, que estaba colonizando Cochinchina tras la expedición franco-española. Al principio se trato solo de inversiones y apoyo a la industrialización del país, algo que el rey Rama IV acepto para evitar cualquier tipo de colonización de su país y porque, obviamente era beneficioso el desarrollo económico siamés. Sin embargo, en 1861, ya a finales del mandato de Roon, se le ofreció un protectorado a Siam en el cual el rey seguiría en el trono y tendría funciones como "Defensor del pueblo siamés" (un cargo mas que todo honorifico). El rey Rama IV, quien pensó que era mejor no provocar a los alemanes, acepto y en esas fechas se estableció este protectorado.

Otto von Bismarck (1861 - 1893)

Fue el que mas tiempo como Primer Ministro estuvo y por consiguiente, el que mas aportes dio a Alemania. Luego del periodo de Roon como Primer Ministro, era necesario establecer uno nuevo. El 23 de septiembre de 1861, Bismarck fue nombrado ministro y presidente en funciones del Consejo de Ministros; el 8 de octubre tuvo lugar el nombramiento definitivo y firme. El rey se deshizo en disculpas con su esposa por haber nombrado para el cargo a su mortal enemigo: "Después de orar y analizar cuidadosamente el asunto, he tomado al fin esa decisión", escribió a la reina Augusta.

En esos días, nadie era capaz de imaginar ni por lo más remoto que semejante nombramiento iniciaba una colaboración de casi tres décadas entre el monarca y su nuevo primer ministro. Al principio, la impresión generalizada era que el gabinete Bismarck no duraría demasiado y que su mandato transcurriria como todos los demas: con un periodo de 4 años, y él mismo lo creía así a tenor de la carta antes aludida que escribió a su esposa. Todo el mundo temía un gobierno al margen de las instituciones estatales, un predomino de los sables, guerras en el exterior y un decadentismo ruinoso siguiendo las huellas del anciano Heinrich von Treitschke, quien escribió en esa época que "se gobernaba dando muestras de una consumada frivolidad". A esto se le debe añadir la oposición a la política exterior de sus amigos conservadores y hasta del rey. De cualquier modo, la población alemana no tardo en darse cuenta de la habilidad politica de Bismarck.

Otto von Bismarck en la década de los 1860s.

Lo primero que hizo Bismarck en su mandato fue convocar a una Asamblea Nacional Constituyente que sustituyera la de Frankfurt. La propuesta de Bismarck de realizar una nueva constitución fue inmediatamente rechazada con vehemencia por liberales y socialistas, puesto que estos sabían que Bismarck pronto buscaría la manera de disminuir la influencia en el Reichstag de ambos partidos y que establecería los medios para perpetuarse en el poder. Bismarck sabia entonces, que, era necesario buscar alianzas con otros grupos minoritarios del parlamento (como el centro católico) para convocar a esta asamblea. De esta manera, estableció rápidamente alianzas parlamentarias. Asimismo, como buscaba no tener oposición o tener la mínima posible, busco la manera de restar apoyo popular a estos partidos. Para ello, comenzó una campaña a gran escala especialmente entre la clase media, desacreditando a los liberales en esta. Estos, quienes no se quedarían con los brazos cruzados, comenzaron también una, usando a su favor el hecho de que fueron los liberales quienes unificaron Alemania. Sin embargo, los conservadores fueron quienes obtuvieron mayor apoyo, ya que los Junkers (con los que Bismarck ya se había aliado antes) ayudaron en la financiación. Los liberales, prácticamente desesperados, buscaron cambiar el método por el cual se convocaría a esta asamblea, intentando hacer una enmienda constitucional en la cual se estableceria que una asamblea debería ser convocada con el consentimiento de todos los Landtags (parlamentos de cada estado) de Alemania, en los cuales al menos uno existía una mayoría liberal. Sin embargo, teniendo en cuenta que ya Bismarck contaba con apoyo popular, a la final se tuvo que eliminar esta posibilidad temiendo que los liberales a la final contaran con menor apoyo del que ya tenían.

De esta manera, el Primer Ministro Bismarck convoco a esta Asamblea Constituyente, teniendo que ser esta constituida por representantes escogidos a través de sufragio según lo establecido en la constitución de Frankfurt. A través de esta constituyente Bismarck aumento sus poderes: el Primer Ministro ahora era quien tenia el poder de designar al gobierno del Reich. Sin embargo, el Káiser podía participar en este proceso y el Reichstag también podía proponer candidatos. Asimismo, si el Káiser y si al menos 3 quintos del Reichstag estaban de acuerdo, se podría no aceptar este gobierno obligando al Primer Ministro a convocar a uno nuevo. También no se limito el mandato de los Primeros Ministros dejándolos gobernar si el Káiser así lo consideraba, con la finalidad de "evitar que hombres talentosos no puedan seguir ejerciendo el cargo de Primer Ministro". Se ilegalizaron los partidos comunistas radicales y los anarquistas considerándolos una amenaza al pueblo alemán. Con respecto al nombramiento del Primer Ministro, Bismarck propuso que este fuera designado por el Káiser cada 4 años pero que era necesario que al menos una mayoría simple del parlamento lo aprobara, para evitar un abuso de poder del emperador.

Ya con una constitución que lo dejaría gobernar tranquilo, y con el apoyo del Káiser, Bismarck comenzó a ponerse en marcha. Lo primero que hizo fue comenzar con una política de germanización (aunque mucho más leve que en NLT) para tener una Alemania culturalmente homogénea. Bismarck promovió la migración de polacos a las colonias y la migración de alemanes a Posnania. De esta manera, se logro tener una metrópolis mas alemana.

La industrialización progresó de forma dinámica en Alemania impulsada por subsidios y legislaciones gubernamentales, promovidos por Bismarck. Los fabricantes alemanes comenzaron a captar los mercados domésticos de las importaciones británicas y también a competir con la industria británica en el extranjero, particularmente en los Estados Unidos. 

Bajo Bismarck, Alemania estuvo más cerca que cualquier otro Estado de las concepciones modernas de bienestar social. Los trabajadores alemanes disfrutaban de beneficios por enfermedad, accidentes y maternidad, comedores y vestuarios y un plan nacional de pensiones antes de que estos se pensasen incluso en los países más liberales. Sin embargo, la vida de los trabajadores, como en todo el mundo de esa época, era dura. En las fábricas de acero se operaba 11 horas diarias y 66 horas semanales. No estaban garantizados ni descanso, ni vacaciones. En Alemania, como en todos los países industriales, había cierta pobreza y protestas. Esta política se dió con la finalidad de detener el ascenso de socialistas y demás partidos que eran una amenaza para la hegemonía bismarckiana.

El canciller germano concentró su atención en el equilibrio dentro del continente europeo, mientras el resto de las grandes potencias orientaban su actividad hacia la formación de un imperio colonial. La opinión inicial de Bismarck era contraria a las empresas coloniales para cuyo control Alemania no disponía de un potencial naval. Por otra parte, mientras algunas potencias consideraban la actividad colonizadora como una fórmula para suavizar la presión demográfica, Bismarck contemplaba con recelo las migraciones, y consideraba que una población numerosa en la metrópoli era indispensable para mantener un papel relevante en la escena internacional. Las ventajas económicas tampoco eran evidentes y, sobre todo, la amistad con Inglaterra, requisito indispensable del sistema diplomático continental, podía enfriarse si aparecían tensiones coloniales. Por otra parte, no se podían ignorar las peticiones colonialistas que formulaban desde los años 60 los comerciantes de Hamburgo. Y, además, a finales de los años 70, la crisis económica, las tensiones sociales y una mayor presión (como la Sociedad Colonial, por ejemplo) inclinaron al canciller a revisar su postura, pero señalando que debería tratarse de una expansión limitada, y que no supusiese compromisos financieros para el Estado. Asimismo, a la final Bismarck pensó que el aporte alemán a la guerra de Crimea podría servir como justificativo para el establecimiento de un imperio colonial.

La actividad colonizadora alemana se desarrolla en cuatro zonas: el golfo de Guinea con el protectorado de Camerún (que también abarcaría parte de la Nigeria en NLT), en el suroeste africano se proyecta la explotación de minas de cobre; en África Oriental se recorren las regiones ubicadas ante la isla de Zanzíbar, con partes de la Zambia de NLT, en Oceanía se proclama la soberanía sobre el noreste de Nueva Guinea y el archipiélago de Nueva Bretaña, llamado archipiélago Bismarck en honor al Primer Ministro. La Conferencia de Berlín en los años 1884-1885 define los derechos coloniales y regula los dominios sobre las cuencas de los grandes ríos, y sobre todo, del río Congo. Bismarck se erige en el árbitro de las cuestiones coloniales, pero al precio de enfriar un poco las relaciones con las otras potencias europeas, especialmente con Francia. Con Gran Bretaña no hubieron muchos problemas gracias a la amistad impulsada por Bismarck y por otros Primeros Ministros que culminaron con la firma de la Entente Cordiale entre Reino Unido y Alemania en 1898.

Sin embargo, Bismarck no podía ser Primer Ministro por siempre. Además, su edad ya le estaba impidiendo poder ejercer el cargo, de manera que voluntariamente dejo el cargo de Primer Ministro tras terminar su octavo mandato. Además, las fricciones con el Káiser Federico se estaban haciendo demasiado grandes. Sin embargo, su legado fue grande y ayudo enormemente al desarrollo de su nación.

Leo von Caprivi (1893 - 1897)

Luego de Bismarck, vino Caprivi. Federico no estaba del todo contento con tener que haberlo nombrado, sin embargo a su consideración era el único hombre capaz. Sin embargo, Federico y el Reichstag supervisó de cerca la labor de Caprivi. Por ello, no se adoptó el Nuevo Curso de NLT. Caprivi promovió el desarrollo industrial y comercial, y concluyó numerosos tratados bilaterales para la reducción de barreras tarifarias. Sin embargo, este movimiento hacia el libre comercio enfureció a los conservadores intereses agrarios, especialmente de los junkers.

El Primer Ministro Caprivi.

Bajo la presión del Káiser Federico, siguió con el acercamiento con Reino Unido, así como en parte con Rusia, el cual fue promovido por Bismarck. Un número de reformas progresistas fueron llevadas a cabo durante el periodo de Caprivi como Primer Ministro. El empleo de niños menores de 13 años de edad fue prohibido y el empleo de niños de entre 13-18 años fue restringido a un máximo de 9 horas al día, en 1894 el trabajo en domingo fue prohibido y un salario mínimo garantizado fue introducido, y el trabajo para las mujeres fue reducido a un máximo de 10 horas. Los tribunales industriales fueron establecidos en 1895 para arbitrar sobre disputas industriales, y Caprivi invitó a representantes de los sindicatos a sentarse en esos tribunales. Además, los aranceles sobre la importación de madera, ganado, centeno y trigo fueron reducidos y un proyecto de ley financiero introdujo impuestos sobre la renta progresivos según las ganancias individuales. En el aspecto colonial, promovió el desarrollo económico de las colonias alemanas.

Johann von Miquel (1897 - 1902)

El Primer Ministro Johannes von Miquel.

Miquel sucedió a Caprivi. Su mandato se caracterizó por la energía con la que trató con las cuestiones sociales, siempre escuchaba los puntos de todas las clases sociales y logró un buen balance entre economía y bienestar, lo que le dió una gran reputación. Asimismo, fue uno de los pocos Primeros Ministros del Partido Nacional Liberal (NLP). Apoyó desde el principio las reformas de Bismarck, al verlas como un gran avance en materia social. Miquel tenía un buen conocimiento de Economía. Durante su periodo como Ministro de Finanzas, de 1890 a 1897, se distinguió por intentar reformar el sistema de impuestos, cosa que no logró en un principio, pero que luego ya como Primer Ministro logró hacer. Murió a principios de su segundo mandato, en 1902.

Botho zu Eulenburg (1902 - 1908)

Botho zu Eulenburg,

Eulenburg fue el sucesor de Miquel. Si bien en un principio Caprivi había recomendado al experimentado administrador Eulenburg para que ocupase su puesto, el para aquel entonces Primer Ministro de Prusia pronto le hizo la vida difícil a Caprivi, quien a menudo pensó en presionar para su relevo. A la final, Miquel fue el elegido del Káiser, sin embargo, con la muerte de Miquel Eulenburg era la mejor opción. Siguió intentado restar la influencia de los socialistas llevando a cabo reformas sociales parecidas a las de sus predecesores. Eulenburg era un amante de las artes: promovió la apertura de museos y cuando tenía la oportunidad, asistía a la Ópera, cosa que el Káiser Federico también hacía. Si bien era conservador, el hecho de que fuera Primer Ministro fue un alivio para los liberales, puesto que Eulenburg a pesar de todo tenía una que otra simpatía liberal. Esta afición por las artes y su relativo liberalismo le dieron el favor del Káiser, quien veía a Eulenburg como el Primer Ministro perfecto. A pesar de ello, no pudo tener un tercer mandato: su enfermedad poco a poco lo incapacitaba cada vez más para gobernar y terminó dimitiendo a mediados de su segundo mandato, en 1908. Murió en enero de 1910.